A pesar de entender que no supe entenderte,.... de bailar entre besos heridos de nada,.... vacíos,... como el alma vacía del cuerpo que miente,.... mentido,... que después se disfraza ocultando la herida,... que recibe el que hiere,.... hiriente,.... a pesar de tenerte sin haberte tenido,... de embriagar los recuerdos con recuerdos fingidos,.... deformes,.... como andrómina eterna en el tiempo perdido,..... que se pierde en los daños de saberse sintiendo,.... de perder lo sentido,..... a pesar de perderme en lo que ya he perdido,... de morir la nostalgia del amor del olvido,.... doliente,... despiadada condena del peor enemigo,.... el destino de otro que será tu destino,.... y a pesar de ser sólo el pasar del pasado,.... y de ser en tu vida quién nunca ha existido,... y de no merecerte,... algún día sabrás que no pude olvidarte,.... que de tanto quererte me dejé de querer,... y a pesar de no ser,... de no estar,... me quedo con aquello que no puedes quitarme,.... derrotado y vencido,... maldiciendo mi suerte,... el saber que soy yo quién más te ha querido,..... que se muera el destino,.... para mi es suficiente,.... PD: Dios no me quiere y el Diablo me tiene miedo.
José Ramón Marcos Sánchez
